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El investigador del Instituto del Agua y las Ciencias Ambientales de la Universidad de Alicante (IUACA) durante su etapa doctoral, Antonio Jódar Abellán, se ha alzado con el ´V Premio a la mejor Tesis Doctoral sobre Cambio Climático en el arco mediterráneo español´ por su tesis doctoral titulada ´Hydrological impacts of global change. Adaptation alternatives in complex water systems with water resources scarcity and severe natural risks (Southeast of Spain)´. La investigación ha sido dirigida por Javier Valdés Abellán, profesor de la Universidad de Alicante (UA) y codirigida por Daniel Prats Rico, también de la UA, y Pedro Jiménez Guerrero, de la Universidad de Murcia.
Antonio Jódar explica en esta entrevista en qué consiste su tesis premiada y por qué durante las próximas décadas se deberá apostar por recursos hídricos de origen no convencional como la reutilización y desalación.
En líneas generales, ¿explícanos en qué consiste tu tesis doctoral?
Se trata de un trabajo centrado en los recursos hídricos, pero atendiendo a un enfoque integral de dichos recursos, ya que se analiza la problemática de los mismos en el Sur Este de España desde el punto de vista de la escasez (sequías, explotación intensiva de acuíferos, etc.) y de la severidad de los mismos durante los fenómenos convectivos extremos (danas, inundaciones relámpago o flash floods). Como solución directa al problema de la escasez, en la mencionada tesis se apuesta por las tecnologías de reutilización de efluentes depurados y de desalación de aguas marinas y salobres. De hecho, la reutilización también resulta muy útil ante un evento extremo, cuyos recursos hídricos pueden ser almacenados en tanques de tormenta, parques inundables (en esta tesis se estudia el parque inundable de la Marjal en Alicante), etc. para ser posteriormente destinados a determinados usos como el regadío de parques y jardines previo tratamiento en una estación depuradora.
¿Cómo surge la idea de llevar a cabo este trabajo?
Fueron mis directores los que me propusieron esta idea de tesis doctoral más integradora. En un principio, el estudio estaba más centrado en un proyecto de tesis enfocado a la modelización, ingeniería hidrológica y cambio global, pero los tutores también me indicaron que sería muy conveniente estudiar estos problemas intentando proponer a la vez soluciones (como la reutilización, la desalación, etc.). Por ello, sus principales líneas de investigación abarcan la modelización hidrológica; cambio global; balance hídrico; demandas de agua de origen agrario y urbano; tratamiento de aguas residuales y reutilización; desalinización; costes del agua; erosión del suelo; y energía solar.
¿Cuántos casos de estudio se han analizado?
En los tres primeros artículos de la tesis, vinculados al cambio global, escasez e inundaciones se analizan 6 cuencas hidrográficas y 1 acuífero karstificado (el acuífero de Mela en Alicante). En los dos siguientes artículos, más relacionados con la reutilización y la desalación, se analizan numerosos municipios del área funcional Alicante-Elche y de toda España (en el artículo de revisión sobre la reutilización de efluentes en España).
¿Qué conclusiones has alcanzado?
En cuanto a las inundaciones en la zona estudiada, sus efectos fueron más notorios y severos en aquellos emplazamientos incorrectamente urbanizados (edificaciones en ramblas, etc.). En este sentido, me llamó poderosamente la atención la reducida percepción social ante el riesgo de tales eventos, ya que numerosos fallecimientos producidos en los últimos años se produjeron debido a que la población no concibe como peligrosa una corriente de agua de 30 cm de altura. En cuanto a la escasez de recursos hídricos, sequías, etc. se identificó una reducción paulatina del régimen de precipitaciones y por ello de las aportaciones de referencia (agua superficial que es recogida en los embalses, agua subterránea almacenada en los acuíferos, etc.). Al mismo tiempo, la temperatura media está aumentando lo que provoca que aumente la evapotranspiración, las demandas de agua de origen agrario, etc.
Gracias a las tecnologías de reutilización y desalación, la relación entre oferta y demanda de recursos hídricos queda parcialmente compensada, aunque se observa un exceso de demanda (de consumo) sobre la oferta de recursos hídricos que tenemos, por lo que se sobreexplotan los acuíferos, etc. Durante las próximas décadas, en las que evidentemente la demanda de recursos hídricos continuará incrementándose debido al aumento de población o mejora en el nivel de vida, se deberá apostar aún en mayor medida por la oferta de recursos hídricos de origen no convencional (reutilización y desalación entre otros), ya que las aportaciones de referencia disminuirán como consecuencia del cambio global. No obstante, queda margen de mejora ya que actualmente en torno al 30% del volumen depurado en el sur este de España es vertido al Mar Mediterráneo.
¿Cuál es el impacto social de tu investigación?
Durante la tesis se han realizado determinadas encuestas a los actores sociales implicados, desde expertos hasta población de a pie, siendo en general el grado de percepción social de los problemas estudiados medio-bajo. Por ello, se debe potenciar la transferencia de conocimiento y de acción social desde los centros de investigación, con el fin de que los principales resultados de los estudios lleguen a la población.
¿Cómo mejora tu trabajo a la adaptación y mitigación al cambio climático?
Los trabajos científicos realizados en esta tesis doctoral han tenido una clara transferencia y conexión con las autoridades locales debido a diferentes motivos:
Por último, ¿qué opinas acerca del futuro de la I+D+i en España?
Creo que se debe invertir más en el sector de la I+D+i en España, intentando acercarnos paulatinamente al gasto realizado al respecto por otros países del entorno europeo como Francia, Italia, Alemania, etc. En este sentido, se deben agilizar los trámites administrativos relacionados con la resolución de determinadas convocatorias, tanto predoctorales como postdoctorales. Por poner ejemplos concretos, es común que en España se tarden en resolver contratos cuya duración ronda los dos años durante un año entero, es decir se tarda en resolver un contrato precisamente el 50% de la duración del citado contrato. Ello conlleva que los investigadores predoctorales y postdoctorales estemos en una situación clara de incertidumbre laboral, trabajando durante muchos meses sin contrato laboral.
