Acciona mejorará la depuración de Portugal
2024-11-23
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Tecnoaqua, publicación profesional del Grupo Infoedita especializada en el sector del agua, estará presente con stand en el 32º Congreso Internacional No Dig-Tecnologías sin Zanja que se celebra en el Centro de Convenciones de Ifema del 13 al 15 de octubre. Este congreso, que por primera vez se celebra en España bajo el auspicio de la Asociación Ibérica de Tecnología Sin Zanja, que actúa como anfitrionala, es el punto de encuentro mundial de administraciones, organismos públicos y privados, constructoras, empresas de servicios, operadores, instaladores, ingenierías, consultoras, fabricantes y distribuidores de equipo, asociaciones empresariales, colegios profesionales, universidades y escuelas técnicas, así como centros de investigación y desarrollo tecnológico relacionados con las tecnologías sin zanja.
España acoge por primera vez el 32º Congreso Internacional No Dig, un congreso y exposición internacional que reúne cada año a los mejores ingenieros del mundo. Los asistentes tendrán la oportunidad de aprender nuevos métodos y técnicas que ahorran dinero y mejoran infraestructuras sin perjudicar a los ciudadanos ni al medio ambiente. El visitante podrá entablar contacto con fabricantes, distribuidores, operadores e instaladores de 17 países, una oportunidad única de networking para ampliar negocios. En este foro tienen confirmada su participación ingenieros de Estados Unidos, Canadá, India, Irán, Polonia, Alemania y España. El programa incluye sesiones técnicas y conferencias científico-tecnológicas, un total de 61 conferencias, 38 en inglés y 23 en español, y una extensa exposición con las últimas tecnologías No Dig.
Las tecnologías No Dig, también llamadas sin zanja, son los sistemas y procesos utilizados para realizar los trabajos de los servicios enterrados, como las redes de gas, electricidad, fibra óptica, telecomunicaciones, conducción de agua y pasos subterráneos de infraestructuras como carreteras, ferrocarriles, ríos o aeropuertos. El desarrollo tecnológico de la última década ha permitido que el coste de las obras que emplean tecnologías sin zanja sea menor que el alcanzado con las tecnologías tradicionales. Las tecnologías sin zanja suponen un ahorro del 20% en la factura de obra respecto a otras tecnologías.
El sector mueve 1.200 millones de euros anuales y emplea a 40.000 personas en España. Hoy día se habla de las smart cities, ciudades inteligentes basadas en un desarrollo urbano sostenible. Una de las características de este modelo de ciudad es la realización de inversiones en infraestructuras de energía y telecomunicación que promuevan la calidad de vida del ciudadano y un desarrollo económico y ambiental durable y sostenible. Las tecnologías sin zanja tienen un papel crucial en el desarrollo de estas ciudades.
Las tecnologías sin zanja se emplean principalmente en perforación direccional y rehabilitación de tuberías desde hace más de 20 años. Presentan un campo de actuación muy amplio, desde obras de construcción sin apertura hasta la limpieza de tuberías de canalización. El ensanche de las ciudades y el auge del concepto smart city han provocado que el empleo de las tecnologías sin zanja en España se haya incrementado un 70% frente a las tecnologías convencionales.
Las administraciones públicas y las utilities son sus principales públicos. Las administraciones y las empresas de servicios públicos buscan mejores formas de actualizar y dar mantenimiento a las redes de agua potable y saneamiento, gas y electricidad, así como suministrar fibra óptica a toda la población, lo que supone una gran oportunidad de inversión para el sector de la tecnología sin zanja.
Las tecnologías sin zanja en España
La utilización de las tecnologías sin zanja en España tiene que crecer hasta situarnos a niveles europeos. La Asociación Ibérica de Tecnología Sin Zanja considera que es necesario un crecimiento de entre el 15 y el 20% para mantener el estado de bienestar de las ciudades y la calidad de vida de sus habitantes. Ciudades como Madrid, Santander, Sevilla, Córdoba, Alicante, Almería, Valencia o Castellón tienen acuerdos con las compañías de agua, así como Badajoz los tiene con las compañías de gas para compartir conductos. Esta asociación considera necesaria la promoción de estas tecnologías por parte de la administración y su implicación y compromiso para su implantación, tal y como ocurre en Europa.
