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Wehrle, empresa especialista en el tratamiento de aguas, ha conseguido de la mano de la UTE Sacyr-Sadyt implantar su primera planta Biomox en España, dentro de los trabajos de ampliación y mejora de la EDAR de Badajoz. Esta tecnología, basada en la oxidación anaerobia de amonio con bacterias tipo Anammox, está ideada para la eficiente eliminación de nitrógeno de la corriente de escurridos procedentes de la deshidratación de lodo anaerobio en la nueva EDAR de Badajoz.
Los retornos de la deshidratación son corrientes presentes en aquellas EDAR con digestión anaerobia de lodo exceso, que se caracterizan por una elevada concentración de amonio y por un reducido contenido en materia carbonosa biodegradable. Estos retornos suelen ser devueltos sin tratar a cabecera de planta, pudiendo llegar a aportar hasta un 20% de la carga total de nitrógeno en la línea principal de una EDAR.
Con el proceso Biomox se elimina de forma significativa y con mínimos costes de operación el contenido en nitrógeno de los escurridos, con el consiguiente impacto en la línea principal, que requiere unos menores volúmenes de reacción y reduciendo los consumos de aireación para la oxidación del amonio. Se estima que la implantación de un proceso Biomox en una planta ya en funcionamiento puede reducir hasta en un 25% los valores de amonio en el vertido final.
Las grandes ventajas aportadas por este proceso hacen que este tratamiento específico de la corriente de retornos esté siendo cada vez más requerido, tanto en los pliegos técnicos de nuevas EDAR, como demandado directamente por los propios explotadores de depuradoras en operación.
La tecnología Biomox, implantada en España por Wehrle y probada con éxito en más de 5 referencias en Alemania, destaca principalmente por tratarse de un proceso continuo en dos etapas: en un primer reactor aerobio se produce una nitritación parcial del amonio a nitrito y en un segundo reactor anóxico tiene lugar la oxidación anaerobia del amonio mediante microorganismos autótrofos tipo Anammox sin adición de oxígeno ni de materia carbonosa y sin necesidad de utilizar ningún material como soporte del lodo. Ambas etapas exigen un estricto control del proceso para alcanzar un elevado rendimiento en la eliminación de nitrógeno.
El hecho de tratarse de un proceso en continuo, con lodo granular no soportado y en el que las distintas reacciones biológicas se llevan a cabo en reactores independientes, confiere al Biomox una gran estabilidad de operación y facilita el control y la robustez del proceso frente a otros procesos desarrollados en reactores, por ejemplo de tipo SBR, en los cuales se lleva a cabo una alimentación por cargas y las reacciones se llevan a cabo por fases en el mismo reactor.
Con la consecución de este proyecto, la tecnología de Wehrle suma una nueva referencia en una aplicación tan novedosa y con tanta proyección en el mercado español como es el tratamiento de escurridos de EDAR. La puesta en marcha de la instalación en la ampliación de la EDAR Badajoz y la correspondiente inoculación de las bacterias especializadas está prevista para finales de 2015.
