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La gestión eficiente de las aguas residuales es uno de los mayores desafíos del siglo XXI. El pasado 22 de Marzo, Día Mundial del Agua, la ONU llamó la atención y sensibilizó a la población mundial acerca del consumo del agua dulce y de la valorización de los vertidos residuales. Salher, como referente en el sector del tratamiento de aguas, ha diseñado y suministrará en 2017 una planta de tratamiento de aguas residuales en la nueva terminal de contenedores en el puerto Moín, provincia de Limón, en Costa Rica.
Este proyecto forma parte de un plan de mayor envergadura para modernizar el complejo portuario Puerto Limón-Moín con el fin de desarrollar el corredor logístico en el norte del Caribe y reposicionar el puerto como uno de los más eficientes de Centro América.
La EDAR Salher tendrá una capacidad de 220 m3/día de tratamiento. Las aguas residuales urbanas procedentes de trabajadores de la terminal ya que el vertido de aguas residuales sin tratar acentúa el declive de la diversidad biológica de la zona. Las aguas industriales procedentes de áreas de lavado externo de contenedores. La separación y el tratamiento de los aceites minerales e hidrocarburos producidos por las actividades industriales de la terminal son necesarios para evitar la eutrofización de los ecosistemas costeros y marinos. Además, se prevé la instalación de un sistema terciario de las aguas residuales urbanas tratadas para su reutilización en lavado de contenedores.
Es un paso adelante decisivo en cuanto a gestión sostenible de este recurso, ya que se limitará el uso de agua superficial y subterránea. Hoy al día las industrias reutilizan el 20% de las aguas residuales mediante un tratamiento avanzado (fuente: Informe mundial sobre el desarrollo de los recursos hídricos de las Naciones Unidas 2017). La ONU espera que de aquí a 2020 aumente en un 50% el mercado para el tratamiento de aguas residuales destinadas a usos industriales.
La línea de tratamiento Salher incluye: