Empresas Premium
ATLL Concessionària de la Generalitat de Catalunya ha obtenido la certificación de la norma ISO 22000 que representa una mejora en el tratamiento del agua en alta. Esta norma es un estándar mundial de referencia en el ámbito de la seguridad alimentaria. Y es que el agua también es un alimento que, además de servir para el consumo humano, es un bien esencial para toda la cadena alimentaria.
Con esta nueva certificación sobre la Gestión de la Inocuidad Alimentaria, ATLL, como gestor del abastecimiento de 4,5 millones de ciudadanos, especialmente del Área Meropolitana de Barcelona, aporta nuevas garantías de calidad a los consumidores. Por un lado porque da cumplimiento a los requisitos de la directiva más avanzada en agua de consumo y, por otro lado, porque representa un valor más de confianza tanto para las autoridades de la administración del agua, como para los gestores, clientes y ciudadanos que la consumen.
Hasta ahora, la garantía sanitaria del agua se ha realizado retrospectivamente, y se ha dispuesto de los resultados de los controles de calidad cuando el agua se encontraba ya principalmente al sistema de distribución. La implementación del Sistema de Gestión de la Inocuidad Alimentaria (SGIA) modifica totalmente este enfoque, pasando a ser un control de calidad preventivo que garantiza en todo momento la inocuidad del agua de consumo, que como producto alimentario, llega al consumidor final.
En la práctica, la implementación de este sistema preventivo significa que se deben aplicar programas de prerequisitos, es decir, las prácticas y condiciones higiénicas óptimas que se deben seguir para proporcionar un entorno adecuada para la producción y distribución del agua. También representa una gestión global de análisis de los posibles riesgos sanitarios, y un control exhaustivo de calidad a lo largo de todo el proceso. Incluye la determinación del Análisis de Peligros y Puntos Críticos de control (APPCC) tanto a nivel semicuantitativo como cuantitativo (QCRA y QMRA).
Cabe recordar que esta normativa complementa los controles que ya se realizan en ATLL, como las más de 5.800 muestras de la red Ter-Llobregat analizadas el año pasado para garantizar la calidad del agua suministrada. La Agencia Catalana del Agua ha realizado estos controles analizando cerca de 52.300 parámetros diferentes en los mostreos y los resultados han sido siempre dentro de los márgenes que establece la legislación vigente.