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Almar Water Solutions, empresa referente en el desarrollo de infraestructuras de agua y parte de Abdul Latif Jameel Energy, amplía su cartera de servicios a terceros con la adquisición de la empresa con sede en Chile, Osmoflo SpA. Con esta operación, Almar Water Solutions pretende abordar los desafíos de agua de Latinoamérica, proporcionando soluciones innovadoras y flexibles de desalación, potabilización y depuración.
La inversión incorpora varios contratos de operación y mantenimiento para el sector industrial, así como una flota de plantas móviles de tratamiento de agua con múltiples capacidades que proporcionan soluciones urgentes o a corto plazo a clientes industriales. En respuesta a los retos hídricos de la región, este porfolio se ampliará rápidamente con el desarrollo de proyectos de agua y la prestación de servicios de operación y mantenimiento para una amplia gama de clientes del sector industrial que demandan el outsourcing industrial.
Fundada en 2011, Osmoflo SpA ha desarrollado una cartera integrada de servicios incluyendo entre otros la operación y mantenimiento de la planta desaladora por ósmosis inversa Antucoya, la desalobradora de Centinela, y las plantas de tratamiento de agua residual Aritia y Novaustral..
Tras esta adquisición, Osmoflo SpA se integrará bajo el paraguas de Almar Water Solutions, pero seguirá desarrollando su actividad con normalidad y conservará su nombre comercial a corte-medio plazo. La experiencia del equipo de Almar Water Solutions, junto a la solidez financiera de Abdul Latif Jameel, sin duda potenciará el crecimiento y la eficiencia de Osmoflo SpA en Chile y otros países de Latinoamérica.
Carlos Cosín, CEO de Almar Water Solutions, señalaba que "este hito contribuirá al crecimiento de Almar Water Solutions como compañía y a la diversificación de su cartera de servicios, introduciéndonos en el outsourcing industrial donde contamos con muchos profesionales con una alta experiencia". Asimismo "los proyectos de Osmoflo SpA reforzarán nuestro porfolio de referencias y serán nuestra carta de presentación para el mercado latinoamericano e internacional".
Según el Reporte de la Industria del Agua Urbana en Chile de 2017, "la industria del agua en Chile debe hacer frente a numerosas dificultades operacionales para llevar un agua de calidad a los hogares, debido a las condiciones geoclimáticas y estructurales del país. Poseen desde el desierto más árido del mundo hasta largas distancias entre fuentes y centros urbanos, pasando por accidentes geográficos y una fuerte dispersión de las zonas urbanas en algunos territorios y desastres climáticos, como la sequía, extensas lluvias y temperaturas extremas".
Además, tal como indica el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2 en su Análisis sobre la sequía, la escasez hídrica y la vegetación, "Chile está sufriendo en 2019 una extrema sequía, sobre todo en la zona central, con un déficit de lluvias cercano al 80% entre las regiones de Coquimbo y el Maule, y en torno al 30% entre el Biobío y Los Lagos".
