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La empresa especializada en tratamientos de agua Remosa, a través de su marca Resima, recomienda que la instalación y puesta en marcha de sus equipos se realice por personal cualificado.
Teniendo en cuenta que es de vital importancia trabajar para un buen funcionamiento de los sistemas de tratamiento, depuración y regeneración de las aguas residuales, y en tiempo de coronavirus aún más, la firma Remosa, como fabricantes de sistemas y equipos, tiene identificada una línea de servicio complementario a su actividad principal, como son la supervisión, instalación, puesta en marcha y mantenimiento de los equipos y sistemas que fabrica y vende.
Estas funciones las realiza a través de la marca Resima, recomendando que la instalación de sus equipos la realice personal cualificado, en especial los que incorporen componentes electromecánicos. El objetivo es cuantificar, detallar, verificar, validar y, si todo es correcto, arrancar la instalación orientando al usuario cómo se debe operar para el buen funcionamiento.
En familias como la regeneración, y más concretamente en los equipos GREM, Resima ya se está dando un servicio de puesta en marcha del equipos y su mantenimiento, tal y como se ejeplifica en la imagen con el Parador de Muixia.
