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La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) ha ampliado la acreditación de ENAC para su laboratorio de análisis de aguas con la inclusión de las sustancias peligrosas recogidas en el RD 817/2015, como algunos congéneres poco habituales de la familia de los HCHs (delta y épsilon- HCH), diclorometano, tricloroetileno o antiguos plaguicidas como el paration, además de hidrocarburos por la técnica de GC/FID.
La CHT tiene acreditado su laboratorio de análisis de aguas desde el año 2008. El Laboratorio se encuentra acreditado por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC), según la norma internacional UNE-EN ISO/IEC 17025:2017 sobre requisitos generales relativos a la competencia técnica de los laboratorios de ensayo y calibración, acreditación que avala la bondad de los datos informados por el laboratorio a nivel internacional.
Desde el año 2008, el Laboratorio de Aguas ha realizado constantes ampliaciones del alcance acreditado, o lo que es lo mismo, ha incluido nuevos parámetros a analizar al amparo de la norma internacional. Tras esta última ampliación son más de 300 los parámetros que permiten verificar la calidad de las aguas, tanto de consumo como aguas continentales y aguas residuales.
En el presente año, a resultas de la última auditoría realizada por la ENAC, en julio de 2021, el alcance del laboratorio de la CHT incluye nuevas sustancias peligrosas recogidas en el RD 817/2015, de 11 de septiembre, por el que se establecen los criterios de seguimiento y evaluación del estado de las aguas superficiales y las normas de calidad ambiental, tales como algunos congéneres poco habituales de la familia de los HCHs (delta y épsilon-HCH), diclorometano, tricloroetileno o antiguos plaguicidas como el paration, todas ellas analizadas por técnicas de GC/MS combinadas con la extracción por microgota o la preconcentración por el método de purga y trampa o espacio en cabeza.
Además, el nuevo alcance ENAC incluye el parámetro hidrocarburos analizados por la técnica de GC/FID, cuyo análisis es de gran utilidad en el control de vertidos. Adicionalmente, se ha reducido el límite de cuantificación del amonio (CFA) para alcanzar los requisitos del 30% de la norma de calidad ambiental (NCA) más estricta establecida en el Real Decreto 817/2015.
Esta nueva ampliación del número de parámetros que pueden ser controlados mejora sensiblemente el potencial de esta confederación para el control de la calidad de las masas de las aguas de su demarcación hidrográfica, ayudando a la consecución de los objetivos fijados por la Directiva Marco del Agua y a la mejora y conservación del medio ambiente para su mayor disfrute por los ciudadanos.