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El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha puesto en consulta pública previa a la actualización de dos nuevas Órdenes Ministeriales relacionadas con las entidades colaboradoras de la administración hidráulica en materia de control de aprovechamientos y protección de las aguas del dominio público hidráulico, así como de sistemas electrónicos de control de los volúmenes de agua.
La consulta, que finaliza el 22 de febrero y está disponible aquí, se realiza para recabar la opinión de las personas y de las organizaciones más representativas potencialmente afectadas por las futuras normas. De esta manera, se pueden realizar aportaciones para que sean tenidas en cuenta por el Miteco en la elaboración de las mismas.
Los trabajos se enmarcan dentro de los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Digitalización del Ciclo del Agua, aprobado por Consejo de Ministros el pasado 22 de marzo de 2022, que establece en su línea de actuación la mejora de la gobernanza en materia de gestión de los usos del agua, así como la modificación del Reglamento del Dominio Público Hidráulico. De este modo, precisa la actualización de las Órdenes Ministeriales de entidades colaboradoras, y de regulación de los sistemas para realizar el control efectivo de los volúmenes de agua utilizados y de los vertidos.
Las nuevas Órdenes Ministeriales pretenden, por un lado, establecer un nuevo régimen jurídico de las Entidades Colaboradoras de la Administración Hidráulica (ECAH), de conformidad con el artículo 255 del Reglamento de Dominio Público Hidráulico (RDPH), con el objeto de adaptarse al proyecto de modificación del mismo.
Asimismo, por razones de seguridad jurídica es obligatorio adaptar los sistemas de control, desde la regulación de los vertidos a las aguas subterráneas al marco normativo establecido por la Directiva Marco Europea del Agua, a la gestión integral de los sistemas de saneamiento.
En este sentido, el PERTE de Digitalización del Ciclo del Agua impulsa el uso de las nuevas tecnologías de la información que permitirá mejorar la gestión del agua, además de reducir las pérdidas en las redes de suministro y avanzar en el cumplimiento de los objetivos ambientales marcados por la planificación hidrológica.