Empresas Premium
La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) confirma su apuesta por la reutilización de las aguas residuales para el regadío con las obras de ampliación que se están desarrollando en las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) de Albacete y Almansa. El director técnico del organismo, Manuel Torán, y el jefe de Área y director de los trabajos, Diego Irles, han visitado esta semana las instalaciones para comprobar de primera mano cómo avanzan las obras.
Las actuaciones, que se iniciaron el pasado verano, contemplan un presupuesto conjunto aproximado de 40 millones de euros, y permitirán ampliar la capacidad de tratamiento de las estaciones, eliminar nutrientes y mejorar la calidad del efluente con la instalación de nuevos sistemas de depuración y, finalmente, renovar las infraestructuras que se encuentren obsoletas para una mayor eficiencia y sostenibilidad.
Las obras de ampliación de la EDAR de Albacete, iniciadas en septiembre de 2022, avanzan a buen ritmo y se espera que concluyan a finales de 2025, para dar servicio a una población de 312.500 habitantes equivalentes. La actuación, declarada de interés general del Estado, está incluida en el Programa de Medidas del vigente Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Júcar y en el Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (DSEAR), y están presupuestadas en 32.017.723,82 euros que serán cofinanciados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER 2014-2020.
Las obras permitirán ampliar la capacidad de tratamiento de la planta actual, de modo que se puedan alcanzar los 1.875 m3/h de caudal influente. Además, se va a Incorporar un tratamiento específico de eliminación de nutrientes (nitrógeno y fósforo), que permitirá adecuar las condiciones del vertido a zona sensible. Asimismo, se va a acometer la renovación de aquellas instalaciones y equipos que presenten condiciones de obsolescencia.
El objetivo es reutilizar las aguas residuales para el riego agrícola mediante el tratamiento adicional del efluente por un proceso de regeneración mediante un bioreactor de membranas (MBR), que permitirá alcanzar una calidad del agua acorde a la normativa vigente actualmente. “En estas nuevas instalaciones las aguas residuales se entienden como una fuente de recursos en lugar de como un residuo. Lo que se pretende es aprovechar toda la energía que contiene el agua residual y alcanzar una calidad del agua tal que sea susceptible de ser reutilizada y que permita sustituir las extracciones del acuífero para contribuir a recuperar sus niveles y conseguir su sostenibilidad”, ha señalado el jefe de Área de la Confederación Hidrográfica del Júcar y director de los trabajos, Diego Irles.
La EDAR de Almansa data de 1991, cuando fue construida como una ampliación y reforma del sistema de tratamiento existente desde principios de los años 70. La EDAR trata los vertidos de aguas residuales procedentes de la ciudad y del polígono industrial El Mugrón. Actualmente la depuradora existente no es capaz de tratar debidamente las aguas de entrada debido al aumento de caudal, la carga contaminante y el estado de la infraestructura actual.
El objeto de las obras que se están realizando actualmente es la ampliación y mejora del tratamiento de depuración, tal y como dispone en su programa de medidas el Plan Hidrológico del Júcar con el carácter de Medida Básica para cumplir la normativa comunitaria de aguas. Con este proyecto, la EDAR de Almansa está siendo dimensionada para dar servicio a 63.480 habitantes equivalentes en el futuro. Cuenta con un presupuesto de 8.633.969,48 € y un plazo de ejecución de 29 meses (21 meses de ejecución + 8 meses de puesta en marcha), por lo que está prevista su entrada en funcionamiento en agosto de 2024.
Las obras consisten en la práctica renovación de las instalaciones, tanto de las infraestructuras de pretratamiento y de tratamiento biológico como de las de tratamiento de fangos. Se ha adoptado un proceso de fangos activados en modalidad de aireación prolongada mediante un reactor biológico de carrusel. Se ha previsto además un tratamiento terciario equipado de una microfiltración más desinfección por rayos UV. Como elemento singular, cabe destacar que el proyecto incluye la construcción de un tanque de tormentas, previo a la entrada al proceso de depuración, para poder absorber las avenidas importantes que se producen en la zona.