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Ghana Water Company Limited (GWCL), proveedor nacional de agua del país, se puso en contacto con Kamstrup para ver de qué manera se podía mejorar el servicio que ofrecían. Desde 2018, esta colaboración ha conseguido disminuir las pérdidas de agua en más de un 25% gracias a los contadores inteligentes.
Como en casi todo el continente africano, en Ghana el agua que no se contabiliza se ha convertido en un gran problema. Al hecho de tener unas redes de distribución con un bajo nivel de mantenimiento se le suma el de estar equipadas con contadores mecánicos que quedan fácilmente expuestos a la manipulación.
El grave problema de las pérdidas de agua. La suma de estos y otros problemas llevó a que el suministro de agua en Ghana se convirtiera en algo prácticamente insostenible: por culpa de las fugas se llegó a perder un 54% de la producción total de agua. A eso se le sumaban que, al realizarse una lectura manual de los contadores, el riesgo de facturas inexactas aumentaba.
Decididos a dar una solución a estos problemas, Ghana Water Company Limited (GWCL) contactó con Kamstrup para mejorar el servicio. En el año 2018, GWCL empezó a cambiar parte de sus 950.000 contadores mecánicos por otros inteligentes. En 2024, son ya 112.000 los que se han sustituido por contadores de Kamstrup con unos resultados importantes, tanto desde el punto de vista económico como en el del medio ambiente.
“La compañía realizó un análisis coste/beneficio de la compra de los nuevos contadores ultrasónicos y resultó que todo eran beneficios”, afirma Richard Appiah Otoo, director general de operaciones de Ghana Water Company Limited. Tal y como el mismo explica, “precio no es lo mismo que coste”. Un contador mecánico puede ser en un primer momento más barato que uno inteligente, pero, a la larga, su coste será mayor. “Para calcular el coste real de un contador hay que añadir una serie de variables económicas”, comenta.
En primer lugar, la lectura de este tipo de contadores no necesita personal, por lo que es un ahorro para las empresas abastecedoras. Además, los contadores mecánicos contienen, cobre lo que hace que sean frecuentemente víctimas de robos. A esto se le suma la duración de los contadores, mientras que un contador mecánico se tiene que sustituir cada 3 o 5 años, los de Kamstrup tienen una vida útil de la batería de más de 15 años. “Cuando analizas el coste/beneficio descubres que los contadores de Kamstrup superan ampliamente a cualquier contador mecánico del mercado”, asegura Richard Appiah Otoo.
El proyecto de Agua y Saneamiento del Área metropolitana de Accra, (GAMA por sus siglas en inglés), financiado por el Banco Mundial, pretende aumentar el acceso a unos mejores sistemas de saneamiento y servicios de suministro de agua, especialmente en comunidades con bajos ingresos. Este es el caso de la zona de Tetegu, en la parte occidental de Accra. Esta comunidad, atravesada por el río Densu, es fácilmente inundable. Con lluvias fuertes toda la comunidad queda anegada, por lo que es imposible circular por ella para realizar la lectura de los contadores.
Para solucionarlo, se ha optado por la utilización de drones. GWCL ha conectado la tecnología de lectura de los contadores a un dron y lo ha hecho volar por encima de la comunidad. Tal y como explica Maxwell Akosah-Kusi, del departamento de Tecnología e Innovación en Ghana Water Company Limited, en solo unos minutos se puede dar lectura a los 500 contadores instalados en la comunidad. “En el último vuelo, dimos lectura a 350 contadores en tan solo 3 minutos”.
El cambio de contadores mecánicos a unos inteligentes de Kamstrup ha representado un beneficio económico para GWCL: mayor precisión en la facturación, ahorro de energía y gestión más eficiente de los activos basada en el monitoreo y en los datos. Gracias a ello, el proyecto se está autofinanciando puesto que el aumento de los ingresos cubre los gastos de inversión inicial.
La situación de Ghana es extrapolable a otros países del continente, por lo que la experiencia de este país puede servir de ejemplo para otros muchos. Y la unión de Kamstrup con GWCL demuestra que otra forma de tratar el suministro y distribución de agua es posible. Tal y como afirma Richard Appiah Otoo, “el departamento de I+D de Kamstrup y el producto que entregaron ha cambiado la forma en que los ingenieros de aquí solíamos pensar sobre las mediciones de los contadores de agua".
